jueves, 20 de noviembre de 2008

¿Dónde estás corazón?

Es la pregunta que me hago, a veces, cuando mis propios conatos-antítesis -del amor imperante ubicuo , anegados de dureza y altivez, decaen, flaquean, me abandonan; entonces, es ahí cuando yo ya no me creo mis propias teorías, mis propias filosofías de vida, mis propias intenciones reales, quedando así inmerso en la más profunda y confusa soledad.

La vida, el destino, el azar, aún no sé que me azuzó a pensar como pienso, a creer como creo, a querer como quiero –de una forma demasiado egoísta-, a dictaminar, de manera perentoria, que yo no estoy capacitado para adentrarme en un idilio abnegado-desprendido-respetuoso-duradero, y no morir en el intento.

Es que no creo en las formalidades, en querer bajo presión, en las conminaciones amatorias, en las restricciones sociales, en estar atado a alguien. Aunque, para ser sincero, admiro –y, por qué no, dejémonos de hipocresías, también envidio- a esas parejas con las que me topo a veces, que, con todo y sus reyertas y escaramuzas, se ven bien, contentos, felices. ¿Raro no?

Lo sé, soy consciente y lo acepto, estoy condenado a esa hermosa y tremebunda posteridad: a ser libre y autónomo, a ser intemperante como soy y no sentirme mal por ello, a no estar atado a nadie, a hacer lo que me dé la gana y no negociar mis actos; pero, a la vez, a sufrir la soledad conspicua, esa que te causa la ausencia de un amor verdadero.

3 comentarios:

  1. Es que lamentablemente Julius uno no puede encerrar su corazón ante un sentimiento que uno no sabe cuando llega, no puede decir no tengo corazón así yo solo me quedo y a nadie doy explicaciones con el amor nada que ver.

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

    ResponderEliminar
  3. le dije a cupido que conmigo se tome unas vacaciones q tome unos buenos aires y consigo se lleve su flechas y que se demore en regresar porque después de los tarados, melosos, hielitos y tímidos y alucinados con quienes me flecho ya quiero descansar sali de una relación para empezar otra y de allí tener al entorno preguntándote por el tarados casi el 70 % del día, saber q el meloso me cambio por otra a quién con ella esta planificando su boda para el próximo año, mi mejor amiga con amistades cercanas te dicen cada rato te voy a presentar amigos o te molestan con x persona solo porque estas sola.



    Por eso cupido conmigo se fue de vacaciones porque le obligué, pero yo se que regresará, no estoy resentida con él y ya no quiero a ningunos de ellos son el pasado y cada quien esta haciendo su vida aunque varias veces mis amigas no me lo quieren mencionar sus nombres para no hacerme recordar, pero yo sigo mi vida y cuando cupido regrese se hará una nueva historia, pero ya no seré la misma.

    ResponderEliminar

¿qué opinas al respecto?